Y Eolo, con furia...
abandonó su casa..
Desató su ira...tronchó las ramas...
No valieron ruegos...
no atendió demandas..
Y por toda la jornada...
sufrimos su embestida...
Ya desde lejos, parecía que el fuerte viento nos traía la letania
" Alá es Alá y Mahoma es su pofeta"
que parecía provenir del castillo frente a nosotros...
Aledua...Al-Adwa...la del borde del río...
Una torre árabe cerca del río Magro.. que sería nuestro punto de inicio y final de ruta..
Muchas ganas de andar tiene el personal...pues nada más bajar de los coches, fortísimas ráfagas nos golpearon y nos hicieron considerar el seguir ruta...
La verdad es que la jornada, admitía muchos títulos...pero podría ser la de las 100.000 piedras..
Excelentemente marcada, fue un continuo pisar piedras y más piedras...muchas de ellas, traicioneras, esperando el posible resbalón del que suscribe..
Y cuando acabaron los pedregales, unas largas y pronunciadas pistas descendentes, obligaron al esfuerzo de rodillas..que clamaban contra tan furibundo ataque...
Teníamos mesa reservada al socaire del viento..
Algo falló, porque Eolo, parecía haber hecho allí su guarida..
El que esté repartido el personal, no indica enemistad, sino búsqueda de refugio..
Acabado el almuerzo, breve visita al Azud del Gual, y vuelta ...otra vez con las pronunciadas cuestas de la pista y las piedras traicioneras...
¡ Y el viento inmisericorde !
Llegados a los coches, la obligada foto oficial del grupo, besos, abrazos, estrechar de manos y hasta la próxima....esperemos que sea más tranquila...
Otoñal...Otoño...
Llegaron los ocres, pintaron las hojas
.Primaron los pardos...colores de tierra...
Vientos ululantes, golpean los rostros...
Apuntan las nieves en las altas crestas..
Esperan los pasos en la otoñal senda...
¡ Por fín hemos tenido una otoñal como tiene que ser !
Desde hace tiempo, tuvimos el tiempo otoñal en contra..en octubre todavía semejaba agosto, por el verdor de las hojas..
En cambio, aquí en Manzanera, vislumbramos el otoño en todo su esplendor..
Las previsiones climatológicas, eran bastante malas..bajas temperaturas, lluvia...vientos fuertes y posibilidad de nieve..
El personal iba alborozado por el pronóstico..
Afortunadamente, nada de lo previsto, excepto los fuertes vientos serranos...se cumplió..
Volvimos al hotel Duque de Calabria, que tal buen sabor de boca, nos dejó en la primaveral de junio...
Le otorgamos de nuevo, enlace pernoctante en categoría alta
.Aquí os lo dejo por si queréis ir..
Antes de llegar al hotel, nos fuimos a hacer una pequeña ruta por las cercanías de la aldea de la Escaleruela, verdadero oasis, con abundancia de agua, rodeado de los desérticos cerros de Sarrión.
La ruta fue fácil pero su novedad procuró algún que otro despiste..como siempre, culpa del que suscribe..
La llegada a la fuente provocó lo que sería la tónica de las jornadas: cafetitos, descanso en bares..etc..
Llegados al hotel, el tiempo justo de hacer la inscripción y la comida, pero antes, paseo turístico por el pueblo para hacer gana..
Ligera y corta siesta y desplazamiento a la aldea de las Alhambras, desde la que contemplamos a cierta distancia, las célebres Agujas, paraiso de los amantes de las vias ferratas...
Paseo por la desierta aldea y de nuevo al hotel, que ya calaba el viento frío..
Los juegos de mesa, las copichuelas, y los dulces, proporcionaron un buen tiempo de tertulia y timba...
Al día siguiente tuvimos la ruta fluvial del río Torrijas..
Esta ruta nos deparó el bello paseo otoñal que necesitábamos..
Las fotos no dan idea del cromatismo del paisaje...
Y como no podía ser menos, la llegada al balneario del Paraiso, motivó: descanso, calefacción, cafetitos y larga tertulia..
Fin de la otoñal, despedida y ganas de emprender de nuevo, cualquier excusa que nos permita disfrutar de la Naturaleza..
Aprovechando el día de fiesta, fuimos a la comarca turolense de Gúdar..
Mora de Rubielos....Rubielos de Mora..
Críptico intercambio de apellidos entre los dos pueblos...
¡ Misterios de la Historia ! o de la toponimia..
Como no podía ser menos, empezamos la jornada con una ruta senderista...corta..
Nos desplazamos hasta el embalse de la Tosquillla,
Allí, en mesa reservada y a cubierto...por si llovía, el personal dio cuenta del almuerzo antes de recorrer parte de la Ruta Fluvial..
Vistazo a la senda pedregosa y división de las fuerzas..
Unos por allí...otros por aquí..que no es cuestión de empezar la jornada en la resbaladiza senda..
Cumplido el paseo montañero, de vuelta a Mora...de Rubielos.. donde recorrimos el pueblo en busca de la oficina de Información, pues teníamos visita guiada a las 12..
Pagado el oportuno impuesto...reducido para los jubi, que somos mayoría.. fuimos conducidos a la otrora Colegiata
La verdad es que..aparte la tracería arquitectónica...no tiene nada de interés, debido al expolio que sufrió en la guerra civil..a pesar de los esfuerzos de la guía en llenar de contenido la ausencia...
Acabada la visita, emprendimos la dura subida que conduce al castillo, que desde lo alto, domina la población.
Es una fortaleza, realmente inmensa, que fue creciendo con el paso de los siglos..
Allí tuvieron su centro de dominio, la familia de los Heredia que ocuparon el señorío durante 4 siglos..
Curiosa la equivalencia del noble apellido con el homónimo apellido muy extendido entre la raza calé... ¡ Misterios de la Historia !..
Pasamos bastante tiempo visitando las diferentes estancias y recovecos..
La guia nos fue explicando los pormenores, añadiendo continuamente un cierto halo de misterio a lo que exponía...
Pertinaz en atribuir, indicios templarios a lo que eran simples marcas de los canteros que construyeron el castillo...
A destacar un moderno ascensor que contribuyó a que el que suscribe...que iba con un bastón de montaña...lo utilizara y se ahorrara subidas y bajadas por los sótanos..
El patio de armas
Reproducciones de armas de asalto
Los sótanos más antiguos..
Los muros exteriores
Finalizada la visita, nos dirigimos al cercano pueblo de Rubielos....de Mora, donde teníamos mesa reservada..
A pesare de tener una reserva en firme, la abundancia de personal hizo que nos demoráramos casi 2 horas en el condumio..
A pesar de ello, cabe destacar la excelente relación de calidad y precio que tuvimos a bien degustar..
Por ello, se otorga enlace de beneplácito gastronómico a .
Restaurante Angela Torres
La bondad y abundancia del ágape, precisaba de un paseo por el pueblo que también nos sirvió para conocer la hermosura de su trazado
antiguo y algunos otros edificios..
Curiosidades de la jornada
Los nombres de especialidades de dulces locales...
La extraña prohibición de entrar en el ayuntamiento a los menores...
La verdad es que se refería a que no podían estar en el zaguán durante la fiesta de los toros de fuego...
Así pues, una bonita jornada que cubrió sobradamente, las expectativas del personal..
¿ Quien vino la disfrutó !
¡Quien no vino....se la perdió !
