4 de octubre: Recorrido por el Bohilgues

Decidido, para el sábado, nos vamos a repetir una ruta que hicimos en verano.En esta ocasión, espero que el otoño haya empezado a vestir el incomparable paisaje de esas tierras de Ademuz. Nos quedaremos a comer, así que si quieres venir, confirma en "Comments". El lugar y la hora: las 7 a.m en el Polideportivo de L'Eliana.
Aquí el enlace de la otra vez que intentamos esta ruta en otoño:
Otoñal por el río Bohilgues en Ademuz

¿Caminos?...¡Cuatro!

Cuatro Caminos: Pica en la foto y las verás todas

Ni previsiones meteorológicas tremendistas...ni amenazas de lluvias torrenciales, ni posibilidad de riadas en barrancos... el día nos salió tranquilo, con alguna nube y a veces, tímidos rayos de sol. La ruta prevista, el collado de Cuatro Caminos se realizó con una serenidad, rayana en el nirvana. Pasito a pasito, ascendimos el precioso barranco del Cañar y después en el Alcodori...¿ O sería al revés?. El caso es que a la hora prevista, ya estábamos metiéndole diente al almuerzo, eso sí, debidamente resguardados del aire provocado por alguna ventana abierta a destiempo. Como teníamos previsto, dejamos para otra ocasión la remontada al Rápita y huyendo de algunos negros nubarones, nos dedicamos a la muy noble tarea de recorrer, después de haber ascendido, claro, el castillo de Almonasir. La pena fue que, unas intempestivas- y eternas- obras de restauración, nos privaron de las adecuadas fotos en la torre del homenaje..¡ Otra vez será!.El regreso por las huertas, permitió a más de un@, el ir depredando fruta del campo: moras, uvas, algún higo... Una hora prudencial, nos sorprendió en el coche. regreso a casa y "siesta" avant-dinar.
¡ Hasta la próxima!

27 septiembre: repetimos Espadán

Volveremos a intentar hacer la ruta de la semana pasada.Confirma en "Comments".

Mis andanzas por el Alto Tajo

De manera imprevista, tuve que suspender la salida por Espadán. ¿ Motivo?...Una invitación no programada, por parte de un amigo de la Sociedad Correcaminos. Se me planteó la posibilidad de unirme a un grupo de senderistas que salían hacia el Alto Tajo. No pude resistirme a la tentación y...¡ sucumbí a ella!. A las 7 de la mañana, ya estábamos subiendo al autobús que nos llevaría hasta Poveda de la Sierra, en Guadalajara, donde tendríamos nuestro centro operativo. Antes de llegar al hotel, ya hicimos la primera marcha.

Se trataba de un recorrido circular por las márgenes del Tajo, con el fin de visitar la Cascada de Poveda y la laguna de Taravilla. El paisaje grandioso, el bosque pletórico.
En el cielo, bandadas de buitres sobrevolándonos...¿quizás esperando algún cadáver de entre los senderistas?. La verdad es que tanto la cascada, como la laguna, merecieron el esfuerzo.

No estoy acostumbrado a este tipo de paisaje, sobre todo al boj, que enmarcaba continuamente la senda.


El paso del Tajo, tuvimos que hacerlo a la brava, mojándonos hasta más arriba de la rodilla. No nos importó,pues el día caluroso- a pesar de las previsiones- agradeció el remojo. El regreso lo hicimos de manera más civilizada, atravesando el río por una pasarela de pescadores.


Al día siguiente, tuvimos la segnda marcha. En esta ocasión se trataba de un largo recorrido por el Gr.66, que nos llevó por la cercana serranía de Cuenca para atravesar una preciosa hoz, la del Horcajo. Íbamos con la esperanza de ver de cerca a los ciervos que abundan por la zona. Vimos cagarrutas, huellas, pelos... pero en vivo ¡ ni uno!. ¿ Sería porque éramos muchos y hacíamos ruido? ¿ No era la hora del paseo cervuno? ¡ Qui lo sa!. El caso es que nada de nada. Tampoco pudimos disfrutar de la anunciada "berrea" que nos habían prometido. Solamente unos cuantos privilegiados, pudieron desplazarse a las tantas de la noche , con la furgoneta del dueño del hostal, hasta una zona en la sí que escucharon los berridos amorosos de los ciervos. ¡ Suertudos!.
Por lo menos, nadie nos quitó el privilegio de disfrutar de las vistas maravillosas en la hoz. Paredes verticales rojizas, contrastando con los colores verdes y otoñales que ya van apuntando...

La marcha finalizó en el puente de Martinete, donde nos esperaba el autobús que nos devolvió a la civilización.
Ya sabéis lo poco que me gustan las excursiones con mucha gente, tipo "romería". Sin embargo, debo admitir que en esta ocasión he disfrutado mucho del grupo. Cuando quería ir sólo, únicamente tenía que alejarme unos pasos y podía andar en completa soledad. Y cuando interesaba comentar algo o charrar tranquilamente, encontrabas gente con la que te sentías totalmente integrado.

Seguramente haré alguna otra salida con ellos.

: Espadan forever..

Le he tomado gusto al Espadán. Ya es la tercera ruta seguida por la zona pero...tranquilos. La sierra permite el repetir y repetir sin cansarse -es un decir- ya que tiene múltiples posibilidades. Bueno, en esta ocasión nos dedicaremos a recorrer la zona entre Vall d' Almonacid y Algimia de ídem. Intentaremos subir al Collado de Villamalur . Al bajar,si sobra tiempo, visitaremos el castillo árabe de la Vall. ! .La salida a las 7 a.m desde el Polideportivo de L' Eliana. Si vienes, ya sabes, confirma en "Comments".Se recuerda que las características de las rutas que hacemos, no son aptas para grupos familiares con niños.
La ruta paso a paso

Campanadas a mediodía o Segundas partes sí que fueron buenas

De Por Sueras

Clica en Por Sueras y verás todas las fotos
En esta ocasión, vienen dados dos títulos para la crónica de la ruta. Empecemos por el segundo. Hace unos meses hicimos esta misma excursión, pero el agua, los relámpagos y los truenos, nos impidieron disfrutarla como tocaba. Así que, decidí repetirla, a pesar de que ya se sabe que "Segundas partes no son buenas". Na de na. En esta ocasión, no sólo fue buena, sino buenísima. Empezamos con la consabida subida al castillo que, avisados de la otra vez, no intentamos conquistar. El paseo estaba concurrido, pues nos topamos con compis senderistas a los que conocíamos algunos y otros me conocían por la web...¡ La fama!. El almuerzo, con mesa y mantel en los manantiales de Castro y a tocar las campanadas. Y aquí el primer título. Llegados que fuimos al Mas de la Campana, el personal en riguroso orden y concierto, se dedicó a inundar el valle de las alegres y sonoras campanadas. Sonidos que hicieron saber a "tuti quanti" que habíamos llegado.

En esta ocasión prolongamos la ruta hasta el cercano , pero elevado Pico del Casalet, desde donde divisamos a placer las panorámicas de la sierra. Para placer, el que sintió alguno cuando tuvo que descender en plan gran slalom por la pendiente repleta de pinocha. Abastecidos de fresco elemento bajamos por una recoleta senda hasta la Font de l' Avellaner- de infausta memoria por una caida anterior. Ni que decir tiene, que en esta ocasión, tuve buen cuidado en pasar el riachuelo, pues no quería perder otro bastón. Vuelta tranquila, aunque algo tardía hasta los coches. ¡ Gustazo de excursión!.

13 de septiembre: Sendas del Espadán

Sorry...pero Espadán es una zona recurrente en mis salidas. No hace mucho, anduvimos por la zona de Sueras. Entonces fue una ruta acuática- por la lluvia- y no teminé de disfrutarla. En esta ocasión la alargaré un poco. El recorrido será el siguiente:
Sueras- su castillo- manantiales de Castro- Font de l'Avellaner- Mas de la Campana y Collado del Casalet. Un total aproximado de 18 kms ida y vuelta.
El desnivel: 250-150 ascendentes ,300-400 descendentes.
La salida a las 7 a.m. desde el Polideportivo de L´Eliana. Si vienes, ya sabes que tienes que confirmar en "Comments".

¡ Nos fuimos de copas!

Pica aquí y verás todas las fotos de la ruta
¡No seáis mal pensadooooos!. Al hablar de copas, no me refiero a excesos etílicos del personal, sino de la costosa subida al monte Copa de Montanejos.
No era la primera salida de la temporada, pero como si lo fuera. Saludos, besos, abrazos, parabienes y explicaciones de los viajes veraniegos. Llegados a Montanejos, la recaraba. Tardamos 12 minutos, ¡ si 12! en encontrar un miserable puesto de aparcamiento, casi a las afueras del pueblo. Bueno, debidamente instalado el coche, decidimos subir al monte Copa y después hacer la ruta de los Estrechos.¡ Vale!. Anda que te andarás, sube que te subirás y ¡ para arriba!. El esfuerzo fue pasando factura a algunos espíritus adocenados por la molicie estival y crucera. Además, el tal monte es de los que cuando te piensas que ya has llegado, descubres con estupor que todavía queda otro y así sucesivamente. Casi como las Ninotchas rusas esas.

Por fin hicimos cima y lo celebramos...¡ almorzando, faltaría más!. La bajada, igualmente larga, pero mucho más cómoda, nos dejó en el Gr.7 que fuimos siguiendo hasta el río. Decidimos seguir el plan y ya más relajados nos acercamos a ver los cortados de los Estrechos, ¡ Impresionantes!. Para arreglarlo, a lo largo de la mañana, nos fueron servidas unas raciones de lluvia fina que nos refrescaron la mar de bien. El preceptivo bañito de pies en las aguas termales supuso el final de una muy agradable mañana de senderismo.
Ya sabéis de mi afición a obsequiaros con poesías que encuentro por ahí. Aquí teneis una sobre el agua de Juan Ramón Jiménez:

Quisiera que mi vida
se cayera en la muerte,
como este chorro alto de agua bella
en el agua tendida matinal;
ondulado, brillante, sensual, alegre,
con todo el mundo diluido en él,
en gracia nítida y feliz.

Prometemos volver a la zona, pues nos quedaron ganas de hacer otras rutas que fuimos viendo fugazmente sobre la marcha.