Corría el año 1992 y pavorosos incendios asolaron las montañas valencianas...
Uno de los más desastrosos fue el de los montes de Chera y Sot de Chera...
Afortunadamente, las cenizas de la vegetación dieron lugar a la visualización del mayor de los espectáculos geológicos en nuestro país...
En el año 1966, la Diputación de Valencia, puso en marcha un parque geológico, que hasta el día de hoy, es visitado por geólogos de muchos paises..
Y en este contexto, teníamos hoy tres rutas que nos irían acercando a tan maravillosos paisajes...por cierto...muy desconocidos a pesar de estar tan próximos...
La primera de las rutas consistía en acercarse a ver el Chorrero y las Cuevas de la Garita..
Dejamos los coches frente a un edificio antiguo...en ruinas..
Se trataba del Palacio del Conde..
En tiempos fue residencia de la familia noble de los Montpalau que eran también condes de Gestalgar desde que Felipe IV creó el título...
Desde allí, entre campos de almendros, nos fuimos acercando al inicio de la subida..
Allí había uno de los numerosos paneles cerámicos que van explicando las características geológicas de los diferentes lugares..
Y otro cartel...disuasorio..que advertía de los riesgos que corrían los que se adentraban en el lugar..
Hay que hacer constar que la subida está perfectamente equipada con barandillas y otros elementos de seguridad hasta el pié de Chorrero..
Allí hay un buen equipamiento de picnic con mesas entre una frondosa vegetación..
Por supuesto, que el personal aprovechó la coyuntura para el almuerzo..
Una de las características de nuestro grupo es la de que en cada momento, cada uno de los componentes puede hacer lo que QUIERE..SABE..PUEDE..
Y así,, mientras hubo un grupo que subió y subió esforzadamente hasta llegar al castillo..
Otros..bueno otro..el que suscribe optó por quedarse en modo relajo mientras meditaba en la ruta a acometer la próxima semana..
Reunidas las huestes montañeras en los coches, nos desplazamos hasta Chera, donde iniciamos un SL siguiendo la llamada Ruta de las Fuentes..
Como su nombre indica, es un trayecto que va visitando diferentes parajes en los que iremos encontrando frescas fuentes..
La primera fue junto al pueblo..la llamada Fuente del Barrio..
Por un paraje de vegetación casi selvática..así se le llama en el pueblo.."la Selveta" emprendimos un delicioso paseo en el que pudimos disfrutar de árboles centenarios de grandes dimensiones..
Tengo que decir que la ruta prevista..que era circular..se fastidió porque la hicimos en sentido contrario, lo que nos ocasionó dificultades con las señales y optamos por acondicionarnos una ruta a nuestro gusto..
La siguiente fuente fue la Fuente de la Hoya, situada como su nombre indica..¡ en una hoya!..
Eso significó que la considerable bajada, se convirtiera en una fuerte subida que hizo que más de alguno se dejara allí las fuerzas restantes..
Hay personal que siempre van a la descubierta de higueras " sin amo"...
Pero en esta ocasión, si que se dieron de bruces con "el amo"..
Afortunadamente, el paisano, en vez de recriminarles su afaneo, les ofreció unos higos dulcísimos que él mismo había cosechado..
La vuelta al pueblo, siguiendo esta vez las señales adecuadas, nos hizo ver que..dado lo tardía de la hora...sería conveniente, dejar para otra ocasión la ruta por el pantano de Buseo..
Una agradable comida a la sombra en la que cada cual, pidió lo que le apeteció, puso fin a una agradable ruta de "casi principio de temporada"
Vosotros que tuvisteis fe...
al pronóstico AEMT...
Vosotros que al abrir un ojo..
y ver los rayos y la lluvia..
Vosotros que aún así, lo decidisteis..
" Nos marchamos a la ruta.."
Vosotros que disfrutasteis..
de buen yantar y bello pueblo...
¡ A vosotros la gloria...y la lauda !
Porque había que tener ganas de ruta, con lo que cayó y estaba cayendo, con la dichosa DANA..
Pero, laudas aparte, vayamos a la crónica..
La de hoy, ha sido una inmersión en el mundo feudal..
Allí, tan cerca de Sagunto, vivieron los vecinos a lo largo de los siglos, la opresión del señor de la villa..
La familia Aguiló...posteriormente Barones de Petrés, tuvieron desde su castillo, al pueblo en un puño.
Dominaban todo, absolutamente todo..pero gracias al ayuntamiento, hoy día, se puede recorrer ese mundo feudal, en una ruta histórico cultural la mar de atractiva..
Petrés es un pueblo muy pequeño, pero extremadamente limpio, ordenado..
Nada más llegar, tenemos ante nosotros lo que fue castillo palacio de los Aguiló..
En estado ruinoso, nos habla todavía de lo que fue el señorío de los Barones..
Justo a su lado, está uno de los varios aljibes que tenía la población..
De gran profundidad, durante mucho tiempo fue de donde se abastecía el castillo..
Las calles tienen la tipología de los pueblos valencianos..casas antiguas, junto a otras más nuevas, pero respetando el entorno arquitectónico..
Los agudos oidos de nuestro compi Eugenio, detectaron el típico batir de tenedor y plato, preludio de la suculenta tortilla..
No habíamos empezado a andar, y ya estábamos con el almuerzo, atípicamente abundante...
Finalizado el condumio, proseguimos la visita..
La iglesia, jalona uno de los caminos de Santiago, estaba dedicada ¡cómo no ! a Santiago peregrino.
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Al estar cerrada, no pudimos disfrutar de su interior ni de la cripta en la que se enterraban los dichosos barones... con su escudo nobiliario en primer término en la fachada..¡ modestos ellos !
Todo estaba cerca, y apenas a unos metros teníamos el Ayuntamiento, y el aljibe correspondiente, hoy transformado en espacio cultural y recreativo..
Debo hacer constar que la ruta está excelentemente señalizada con unos discretos azulejos que nos llevan de un sitio a otro.
Así que llegamos al antiguo horno, de origen medieval, donde los sufridos vecinos tenían la obligación de comprar el pan.
En la fachada, el omnipresente.. aguilucho emblema de los barones..
Unas preguntas a unas paisanas, nos encaminaron a la ermita..
Tienen una hermosa escalinata entre cipreses y estaciones de via crucis..
Los vecinos han conjuntado la religiosidad con unas cuantas mesas de picnic que hacen del lugar un entorno muy agradable..
Descendiendo, llegamos a otro de los " negocietes" de los mandones del pueblo,...la almácera o molino de aceite, también de obligatoria utilización por los vecinos...
La ruta cultural, se complementa con otra llamada de los Molinos..
Consiste en ir entre los campos, visitando los diferentes elementos de riego
Pudimos visitar varios molinos que en su origen, para variar eran de propiedad real, aunque pasado el tiempo, fueron vendidos a particulares..
Nos llamó la atención, un enorme huerto que estaba completamente amurallado...
La información recabada, manifestaba que siglos atrás, era una plantación de caña de azúcar, que al ser un producto caro y fácil de hurtar, precisaba de la conveniente vigilancia disuasoria a los manguis..
Como podéis comprobar, la verdad es que el desafío meteorológico valió la pena, sobre todo porque disfrutamos de una mañana sin lluvia y con un agradable sol que nos acompañó hasta el regreso..
Con ese título...
¿Nos imagináis caminndo entre las dunas a los acordes de Lawrence de Arabia ?
Aquí la música..
¡ Pues no !
La primera ruta de la temporada ha sido por el Desierto de las Palmas..
¿ Otra vez con el desierto ?..
Pues resulta que por donde hemos estado, no era ni desierto...ni había palmas...
El término "desierto" hace referencia al retiro espiritual, apartado del mundo que tenían los frailes carmelitas que se establecieron en estos parajes, desde la Edad Media..
¿ Y las palmas o palmeras?
Pues que por estos montes abundan los palmitos..."margallons" en valenciano..
La planta, es la única palmera europea que tenemos...
¿ Aclarado ?...
Pues volvamos a la crónica...
Como os he dicho, ha sido la primera ruta de la temporada..
No hemos tenido una nutrida asistencia para ser
la "prima ruta"..
Sobre las 9 ya estábamos aparcando en Pobla Tornesa, origen del camino...
Hay que decir que la zona...afortunadamente..no ha sufrido ninguno de los incendios que en varias ocasiones han afectado al "Desierto".A lo largo del camino nos fuimos encontrando con todo un muestrario de flora impresionante...
En el mismo pueblo, un árbol de origen guaraní y que los españoles llamaron con el poético nombre de " Bella sombra "..
Pinos centenarios, semejantes a candelabros...
Vegetación de ribera, junto a estanques escondidos..
¡ Ojala nunca haya un incendio por aquí que destruya tanta belleza.¡
Se había informado al personal que la ruta serían unos 10 kms sin grandes desniveles..
No fue del todo cierto..
Sí, lo de los 10 kms....pero... hubo un continuado tobogán de subidas y bajadas que hicieron mella en más de una rodilla..
Nuestro destino de almuerzo, fue la ermita de les Santes..Santas...
Se trata de un antiguo centro de peregrinación de los vecinos de los pueblos cercanos que una vez al año, se agrupan allí. honrando a las dos santas que dan nombre al lugar.
Un área recreativa ad hoc, sirvió de punto de almuerzo al personal..
Tras las oportunas fotos, emprendimos el regreso..
Parecía que mientras almorzábamos, los duendes montañeros habían puesto en gran cuesta la pista..
Se tuvieron que hacer algunas paradas técnicas para ir agrupando al personal..
Tenemos que hacer constar... y así consta, la costumbre que algunos/as tienen de aplicarse con conciencia laxa lo de "Fruta que da al camino.para el peregrino", aunque el camino estuviera a bastante distancia de los frutos..en este caso higos..
Foto demostrativa en la que con gran cariño, se ha procurado evitar la identificación del " recolector/a
El regreso al pueblo, cumplió las expectativas de una ruta primera de la temporada, que esperamos abunde en otras bellas salidas...
