Permitidme una reseña poética...la tomo prestada de Mario Benedetti
Poema “Otoño”
Aprovechemos el otoño
antes de que el invierno nos escombre
entremos a codazos en la franja del sol
y admiremos a los pájaros que emigran
ahora que calienta el corazón
aunque sea de a ratos y de a poco
pensemos y sintamos todavía
con el viejo cariño que nos queda
aprovechemos el otoño
antes de que el futuro se congele
y no haya sitio para la belleza
porque el futuro se nos vuelve escarcha
antes de que el invierno nos escombre
entremos a codazos en la franja del sol
y admiremos a los pájaros que emigran
aunque sea de a ratos y de a poco
pensemos y sintamos todavía
con el viejo cariño que nos queda
antes de que el futuro se congele
y no haya sitio para la belleza
porque el futuro se nos vuelve escarcha
Me viene al caso, porque este fin de semana hicimos lo que nos recomienda el poeta.....
Hemos aprovechado el otoño...
En esta ocasión, nos desplazamos al Rincón de Ademuz...una isla valenciana en el terreno de Teruel...
Ya teníamos apalabrada estancia y posada en Casa Domingo, excelente establecimiento, en el que la relación calidad/ precio nos resultó muy agradable..
Os dejo un enlace por si vais por allí.
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El sábado, antes de llegar allí, nos desplazamos a Moya con la intención de visitar la ciudad medieval que se eleva sobre la llanura y en la que pudimos pasear viendo los diferentes conventos. iglesias, calles y castillo que se alzan altivos allá en lo alto del promontorio..
Antes...habíamos parado a almorzar en un discreto bar de carretera, en el que pudimos ver algo que resultaría profético, al cabo de un rato...
Una preciosa cabeza de ciervo disecada ..
Ciervo...vivo... que pudimos contemplar corriendo al lado de los coches atravesando los sembrados..¡ Una gozada !...
La llegada a Ademuz nos hizo desear aprovechar el tiempo, teniendo una visita por sus calles y monumentos..
Nos llamó la atención la vieja ermita de la Virgen de la Huerta, con una enigmática inscripción en hebreo..
Tampoco renunciamos a enfilar las tortuosas..y empinadas calles del centro histórico...
Enfile que algunos prolongaron hasta el Mirador del Castillo, desde el que se disfrutaba de una vista espectacular..
Volviendo a lo del hotel, nos fue ofrecida una excelente comida, servida con rapidez y que hizo que el personal se decantara por una plácida siesta en sus respectivas habitaciones..
Repuestas las fuerzas, nos trasladamos a Castielfabid, población cercana, enriscada en un cerro en el que destacaba su iglesia fortaleza, desde la que tuvimos un recorrido urbano que rodeaba todas la muralla..
Ya, a partir de allí, nos invadieron los colores otoñales en su plenitud...
Lindas, hojas, de otoño, amarillas, secas, románticas, caen a mí alrededor.
Me han traído la alegría y el perfume de una flor...encontrado en la Net..
Y es que allá donde miráramos, lo amarillo nos rodeaba con un sutil lazo de un
cromatismo precioso...esto es mío, que conste..
Con ganas de naturaleza y como anticipo de la jornada senderista del domingo, nos dirigimos a la vecina aldea de El Cuervo.
Allí pudimos disfrutar de un hermoso recorrido botánico por las inmediaciones..
Ya casi anocheciendo, volvimos al hotel..
Allí, retomamos las viejas costumbres de los típicos entretenimientos de bar: dominó y el juego del parchís..
Hechas las tantas, cada mochuelo a su olivo que el día siguiente se ofrecía cansado por una ruta de casi 15 kms.
Amanecida...desayuno y partida hacia las cercanías del rió Bohilgues, cuyo cauce iriamos remontando hasta el pueblo de Vallanca..
¡ Qué decir de este extraordinario recorrido fluvial, precisamente ahora en otoño.
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Mejor dejar que las imágenes hablen por sí mismas..
Llegados a Vallanca, el grupo se dividió..
Unos optaron por regresar por el mismo camino..
Otros..entre ellos el que suscribe, optamos por volver por la carretera, lo cual fue agradecido por los meniscos que...emocionados..entonaron toda clase de ¡ gracias !..
¡ gracias !..¡gracias!.
El hacerlo así, nos permitió disfrutar de la Hoz desde lo alto..
Al final, llegamos al mismo tiempo a destino, donde nos esperaba ..de nuevo...una comida sabrosa y abundante que requirió...como no podía ser menos..la siesta de algunos en los vehículos, ya que habíamos finalizado el derecho a hacerlo en las cómodas camas de las habitaciones..
Un deseo..
¡ Ójala sigamos teniendo salud para poder disfrutar de la Naturaleza que...generosa siempre..se nos ofrece con sus mejores galas !
Como puede observarse, algunas no pueden evitar el corresponder con un amoroso abrazo a tanta generosidad..
