En Tarazona y en el Moncayo...3 x 1

¡ Por fin llegó el día!...Maletas, mochilas, botas...ropa de abrigo...viaje tranquilo y placentero y llegada a Tarazona.
La verdad es que en este viaje, hemos podido disfrutar de  un estupendo 3 x 1...cultura, historia y arte en Tarazona...etnografia a tope por los pueblos de la comarca y naturaleza plena en el Moncayo...Pero vayamos por partes.

Nos hemos alojado en el Hostal Santa Agueda...alojamiento digno, a un precio razonable y con la particularidad de ser en realidad un museo de la célebre cantante Raquel Meyer..desconocida para los jóvenes pero recordada por la gente mayor. El hostal tenía otra gracia...la identificación por la huella dactilar como condición indispensable para la entrada...era de risa ver la limpieza constante que hacíamos de nuestro índice antes de apretar la plaquita...al principio sólo éramos dos los que podíamos abrir la puerta, pero ante la posibilidad de que nos seccionaran el dedo las féminas, les indicamos la conveniencia de que también ellas pudieran "indicear"

Dedicamos la tarde a la visita de la ciudad. No queríamos quedarnos sin ver la reforma que se ha hecho de la catedral, así que reservamos hora para la visita guiada. La verdad es que la visita es del todo indispensable en una visita a Tarazona...da gusto ver cómo sería la catedral en el momento de ser construida...la pena es que nos quedamos sin ver algunas cosas...mosaico romano..claustro,,que todavía no están restaurados.

A destacar la curiosa plaza de toros no circular, sino octogonal, formada por casas de vecinos que supongo verán gratis las corridas de toros....el Palacio Episcopal, enorme, incluso opresivo en tamaño frente al conjunto urbano...la judería con sus callejas, iglesias, conventos, torres y sobre todo, la fachada  sumamente decorada del Ayuntamiento.

 Frente él, pudimos ver el monumento  del célebre Cipotegato...curioso personaje que, vestido de arlequín, desafía en rápida carrera el lanzamiento de toneladas de tomates..maduros, eso si..cuesta creer que cada año, hayan miles de solicitudes para interpretar a tan tomateado personaje...
La verdad es que Tarazona hace honor a su fama de ciudad monumental..

Un breve paseo por Tarazona "la nuit" disfrutando de una acertada iluminación de los monumentos, puso fin a la primera jornada turiasonense.
Bien de mañana, nos desplazamos al monasterio de Veruela, donde iniciaríamos el recorrido por todos los pueblos de la comarca..
Llegar a Veruela es ponerse en contacto inmediato con la figura de Bécquer...¿ recuerdas?...
¿Qué es poesía? dices mientras clavas en mi pupila tu pupila zul....¿ Qué es poesía?..¿Y tú me ,lo preguntas?...poesia eres tú.

Han montado en las antiguas dependencias de la bodega una muy completa exposición sobre la estancia del poeta en el monasterio. La visita se completa con el recorrido por las diferentes estancias del monasterio.
Pero el motivo de ir a Veruela, no era sólo el ver tan bella obra de arte sino iniciar el recorrido por la Ruta de los Bécquer. Se trata de un recorrido senderista de unos 6 kms que une Veruela con el pueblecito de Leitago, pasando por Trasmoz. El recorrido nos guia por los senderos que los hermanos Bécquer hacían cuando estaban en la zona. De cuando en cuando, unos paneles nos ilustraron con los pasajes literarios que hablan del lugar con dibujos de aquella época.

El recorrido empieza jun to a la Cruz Negra que era donde Bécquer, Gustavo para los amigos, salía cada día a esperar a la diligencia que desde Madrid le llevaba la prensa...
La siguiente etapa fue la visita al yacimiento celtibérico de Oruña. A pesar del vendaval que nos atacaba, pudimos recorrer los restos de la antigua ciudad así como contemplar las hermosas vistas.

La llegada a Trasmoz, supuso empezar a evocar a las brujas que, según la tradición, abundaban en el lugar. Nos cuentan que en las casas ponían una escoba al revés para ahuyentar los malos espíritus.Del castillo se dice que fue construido en una sola noche...a creérselo....

..De la intensidad de frío viento, hablan las imágenes......
Subimos hasta el castillo y allí, tranquilamente sentado, contemplando el paisaje, estaba nuestro amigo Bécquer, Gustavito ya para nosotros, con el que nos hicimos la  consabida foto en plan compis senderistas...

Como curiosidad, decir que en este minúsculo pueblecito, estuvo secuestrado el padre de Julio Iglesias.."Papuchi" para los íntimos. Nos contaron, que de madrugada, unos vecinos que volvían de juerga, se dieron de bruces con montón de GEOS que armados hasta los dientes, iniciaban el asalto a la casa donde estaba el secuestrado..nos dicen que todavía no se les ha quitado el susto...
Poco más adelante contemplamos el barranco en donde cascó la Casca..un bruja que, atemorizada la pobre por los vecinos del lugar, cayó barranquera abajo..un panel nos lo explicó.

Algo cansados, por el ataque del cierzo, llegamos al final de la ruta donde iniciamos el regreso con el coche que habíamos dejado allí.

Aunque llevábamos comida de picnic, hicimos un sacrificio y nos llegamos a Vera del Moncayo donde degustamos confortablemente instalados las pochas, migas, callos y demás lindezas gastronómicas del lugar..lo dicho¡ un sacrificio!.

Recuperadas las fuerzas, dedicamos la tarde a visitar uno por uno...ya en coche...los pueblos más destacados de la comarca...Añón de Moncayo...con su conjunto de casonas renacentistas y castillo reutilizado en casas de vecindad...Alcalá de Moncayo...bella silueta sobre el horizonte y ventorrillo exagerado y disuasorio junto a la puerta de la iglesia...hubo quien tuvo que agarrarse a una verja para no ser lanzado por el ventoso cierzo que bramaba con furia....Los Fayos...con sus cuevas y farallones...Un recorrido aéreo por unas escaleras de un par de  cientos de escalones...sólo las féminas más arriscadas se atrevieron...les llevó al comedero de los buitres que sobrevolaban la zona atentos a tan delicioso manjar....

A destacar la cueva de Caco, patrón de los ladrones y al que no sabemos por qué está dedicada tan majestuosa oquedad.
Regreso a Tarazona y el cansancio de la jornada hizo que perdonáramos el habitual recorrido nocturno.
Temprano, muy temprano, nos dimos cita en la plaza, donde ya nos esperaba Andrés, agente medioambiental, quien sería nuestro guía en la jornada que teníamos contratada. Apelotonados en el todo terreno, emprendimos la ruta en dirección al Moncayo.

El día se presumia frío, ventoso, pero la verdad es que tuvimos de todo...El itinerario se iniciaba a 400 m. de altitud y finalizaría a 1600m en el santuario de la Virgen del Moncayo. De cuando en ciuando parábamos y nuestro guía nos daba unas estupendas explicaciones sobre los tipos de flora, fauna y geología que íbamos encontrando...los bosques de carrascas y flora mediterránea..

.los robledales con sus flores autóctonas: ballesteras, prímulas...el abedular con sus troncos húmedos y traidores...más de una cayó de c...bueno, de espaldas al apoyarse en uno...los diferentes tipos de coníferas..con sus olores peculiares...

De repente, cambiaba el tiempo y nos dimos de bruces con hielo, nieve y ventisca...de lo extremado del clima dan fe los carámbanos de hielo que de cuando en cuando nos encontrábamos...

La cosa empezó a ponerse peor, sobre todo en un tramo de pista que tenía un impresionante barranco a la izquierda...para hacer más graciosa la cosa, estaba completamente helada...

¿Media vuelta y regreso?..de eso nada...gracias a la pericia como conductor de nuestro guía Andrés, enfilamos la cuesta y  llegamos al santuario. Allí bajaron todos menos el que suscribe...nada de tratos con el hielo...y se hicieron las oportunas fotografías...alguna de las chicas dió de c...bueno de espaldas en el suelo...Al bajar, al tener el barranco a la derecha, más brrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr.De nuevo, gracias Andrés por el cuidado que tuviste....
La sorpresa fue encontrar a un  turismo que, alegremente enfilaba dirección al santuario sin cadenas y sin nada...esperemos que no tuviera ningún percance.
Resumen de la visita...desde mi punto de vista: extraordinaria....con ganas de  repetir en otoño

Dado lo tardío de la hora, inciamos regreso a Tarazona donde finalizamos tan bella jornada que agradecemos sobremanera tanto al Ayuntamiento,  como a nuestro conductor Andrés.
A destacar la organización de diferentes rutas que están disponibles en la web del ayuntamiento y que os adjuntamos por si queréis aprovecharlas.
Con pena, vuelta al hotel para recogida de equipaje y regreso a casa..
Bella estancia, buena compañía, preciosos paisajes, buen ambiente...¿ qué más se puede pedir?
Como siempre digo...
Quien vino la disfrutó...quien no vino se la perdió