Hace un año recorrí la Hispania Ulterior...con su capital Mérida y me quedaba ver la zona de la Hispania Citerior..La Tarraconensis con su capital Tarraco...
Como centro de operaciones, me decidí por la opción " Albergues juveniles"...
Tengo que hacer constar que...a pesar del nombre..admiten a personas de más edad...de bastante más edad..
El elegido fue uno situado en la localidad de Altafulla..
La Casa Gran es una antigua casa pairal de considerable antigüedad pero con unas muy buenas instalaciones..
Las condiciones excelentes del albergue sólo se vieron superadas por las atenciones del personal al cargo que se desvivieron por hacerme cómoda la estancia...
¡ Hasta que llegaron los nanos de colonias, momento que decidí poner tierra por medio...!
La sorpresa fue que estaba rodeado por la Edad Media en cuanto al pueblo y sus alrededores..
No era cuestión de ser estrictos en cuanto a las visitas...sólo lo romano...
Juzgar vosotros mismos...
El albergue...
La vista desde mi terraza particular...
El castillo de los Montserrat de Altafulla
Las casas de nueva construcción con una estética adecuada al entorno..
Ayuntamiento de Torredembarra...
Torre medieval e iglesia de San Pedro también en Torredembarra
Los porches medievales de la juderia en Tarragona...
Pero...mi interés iba más para atrás..hacia lo romano.. y en cuanto a ello, la verdad es que no quedé defraudado...
La entrada simbólica, la efectué pasando por debajo del Arco de Bará...Un arco de triunfo por cuyo vano pasaba la Vía Augusta...hoy la N- 340..
Visita a dos ciudadanos ilustres...los Escipiones .
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La tradición hace que el mausoleo situado a las afueras de Tarraco sea conocido como la Torre de los Escipiones ..
Pero las dos figuras que aparecen...en realidad se tratan de la divinidad de la muerte..el dios frigia Atis..
Pero hace bonito llamarla así...
"Relato imaginado"..".vila romana dels Munts"
Tenía una invitación del mandamás de la provincia Tarraconensis..mi gran amigo Valerius Avitus para visitar su nueva domus, situada a unos 10 kms de la ciudad, frente al Mare Nostrum..
Desde una colina cercana tenía un aspecto magnifico como podéis comprobar...
En la entrada se había plantado un hermoso jardín que invitaba al reposo ...pero debíamos entrar...
La domus no tenía nada que envidiar a las hermosas casas que había contemplado a las afueras de Roma..
Un gran patio.. con plantas y agua corriendo...el agradable peristilo..
Unas cómodas termas para solazarse en las agradables aguas..en las que no faltaban las útiles letrinas..
Enormes cisternas que proporcionaban el agua a la mansión...
Unja sorpresa..un criptopórtico subterráneo que evitaba ver a los esclavos ir de aquí para allá..
de repente se abría una puerta y aparecían diligentes..
Por si faltaba algo, la domus estaba en una colina en primera linea de mar...y a un paso de la Via Augusta lo que permitia a mi amigo, acudir presto a sus labores de gobernante en la ciudad..
La sorpresa fue ver a un gran grupo de jóvenes que seguían al pedagogo que les iba mostrando las diferentes partes de la villa...
Bellos estucos adornaban las paredes de las diferentes habitaciones...
Noté un agradable calorcillo en la planta de los pies...¡ tenían aire caliente en toda la casa gracias a un hipocaustum continuamente encendido durante el invierno...
El plato fuerte del viaje era por supuesto la capital Tarraco..
Dediqué toda la jornada a recorrer la parte antigua en la que han ido apareciendo...y aparecen continuamente...vestigios del pasado romano de la ciudad..
El anfiteatro junto al mar, en que se mostraban al populachos feroces combates entre gladiadores...entre fieras...suplicios horribles.
Junto a él, los restos del circo, donde las cuádrigas galopaban veloces ante la admiración de los 25.000 espectadores que aplaudían a la salida de los carros por las enormes cárceres...
Las formidables murallas con la omnipresencia de la torre del Pretorio que domina la ciudad..
Los restos del Foro Provincial, hoy casi desaparecidos..
El agua era lo más importante en una ciudad romana y Tarraco se la hizo traer desde 25 kms, desde las fuentes del río Francolí...
Se conserva en perfecto estado y por el parque que le circunda, pude hacer una pequeña ruta de senderismo..
Eso sí, el vértigo me impidió atravesarlo en su totalidad por arriba..
Un apartado especial merece la visita al reino de la Muerte..
A principios del s.XX, al construir los cimientos del edificio de la Tabacalera, apareció una enorme necrópolis paleocristiana con centenares de tumbas de todo tipo..
.Mausoleos..
Tumbas de ánfora...tégulas...
Como curiosidad, citar que el arqueólogo, promotor y conservador de las excavaciones, Joan Serra, está enterrado allí, bajo un túmulo funerario encontrado en la necrópolis..
Para aliviar el enorme calor pasé a recorrer el Museo Arqueológico de Arte Romano..
Allí en el frescor de sus salas, pude vislumbrar una pequeña parte de lo que había sido la grandeza de Tarraco...
La importancia de su comercio con todos los puertos del Imperio, simbolizado en las enormes anclas..
La belleza de los mosaicos de las domus de la ciudad...
El fervor por el emperador visible en las hermosas estatuas hoy mutiladas..
El rumor de las conversaciones en voz baja de los diferentes próceres de la ciudad...
Satisfecha mi ración de "pasos romanos" di por finalizada mi estancia en la Tarraconensis...
P.D.- La estupenda señalización de los senderos de la zona, me impulsó a tomar uno de ellos y ver
qué daba de si...
Mar de aguas cristalinas...
Peligro no apto para viajeros solitarios..¡ la Prudencia..norma básica..!