higueruelas |
…..por ver si lo divisaba, por ver si lo divisaba.
Y es que, tal como dice la letra de esta canción popular, estuvimos toda la mañana de gira, buscando los sucesivos pinos singulares que había en la ruta. No es que saliéramos muy tarde, las 7.30 h, pero es que últimamente es que tenemos que ir poniendo las sendas, las pistas y los árboles, de lo oscuro que está. Así que, a una hora decente, estábamos mirando dónde aparcábamos los coches, pues el viento era casi vendaval y no nos hacía gracia que nos cayera un pino encima. Emprendimos la marcha del “ocho”, pues habíamos pensado unir dos rutas. El primer pino, el del Tío Mariano no era demasiado espectacular que digamos. Quizás destacaba por sus ramas en candelabro, por cierto, le faltaba una..El que sí que era realmente grandioso, era el Pino de Viga Horcajo. Un tronco vertical de 20 m y casi 200 años de antigüedad nos contemplaba mientras hacíamos las fotos.
La siguiente etapa fue el yacimiento romano de los hornos alfareros. Están debidamente vallados y muy protegidos de los elementos. Apenas pudimos contemplar los hornos y ya nos fuimos en busca de refugio para el almuerzo. Lo encontramos a socaire de unos chalets ilegales que nos ofrecieron somero abrigo contra el viento. Menos mal que las botas circularon y pudimos reponer fuerzas para afrontar la dura subida de los Pinares. Llegados al pueblo optamos por hacer el consabido shoping pastelero antes de emprender la segunda ruta. Esta fue más tranquila…y más corta. A destacar el “Pinitito Rebollón”, una miniatura de pinete que hace fama de su enfermedad folicular. A destacar el antiguo yesar con sus hornos de cal adosados…nunca vi unos así.
Y de final de ruta, el tramo más bonito que nos llevó por una preciosa senda hasta el área de la Fuente del Ladrón y su cercana zona de acampada en la que buscando, buscando dimos con la fuente de la Hoz, pletórica de caudal y penúltima etapa antes de finalizar de nuevo en Higueruelas, dando final a una ruta nueva, y hasta este momento desconocida.
P.D.-Personalmente, creo que sobran tanto las canteras como los aerogeneradores, que serán muy ecológicos, pero afean muchísimo el paisaje.