Encomendados " en " Enguera

Obsérvese que decimos " en" y no " a ".

Y no es que nos hubiéramos encomendados " a"...complétese con el sujeto de fe de cada uno..
Ni que la ruta fuera tan difícil que necesitábamos el auxilio externo...que nunca viene mal, la verdad..
¿ Entonces, qué ?...
Bueno, esperad al final de la crónica y os enteráis..

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Otra cosa...para información del personal...
El que en la convocatoria se dijera..." ruta por los alrededores del castillo  de Enguera", no quiere decir que sea una ruta suave, cortita, sin desnivel...etc...

Habrá que leer mejor la información, pues allí se decía que tendría un desnivel  de 626 metros en 4 kms...¡ verticaaaaal!..
Dimos comienzo a la andadura en la fuente de la Mota, fresquitos y nubladitos..

El que suscribe acongojó...no cambiar ni una letra please..al personal indicando que había una via ferrata...

¿ No lo sabes?...Pica aquí..
Hubo quien estuvo toda la mañana esperando la temida vía..¡ Bromaaaaa!..Pido excusas, pero es que últimamente, el personal no hace más que protestar...
Vayamos a los serio..

La ruta  de la Umbría, es un sendero local...verde y blanco...que remonta de manera paulatina y sin gran esfuerzo la costera en dirección a la Pinada del Sastre...

Observamos que la gran nevada del pasado invierno, también pasó su factura por aquí, pero que el cuidado que tienen los enguerinos por sus montes, les ha hecho no solo retirar los árboles caidos, sino reutilizarlos para señalar aún mejor este sendero..

La llegada al temido cortafuegos...por su pendiente...hizo que el personal se dedicara a almorzar, antes de afrontar el  fuerte repechón..
El que suscribe, prefirió..por experiencias anteriores...seguir subiendo y almorzar tranquilamente en el llano..¡ libertad de decisión!.

Reagrupados en las alturas, nos fuimos hasta el Mojón Blanco, desde el que pudimos disfrutar del horizonte en todas las direcciones...

Algunos también disfrutaron subiendo al dichoso hito..¡ tenían una auto-estima muy alta, como se ve...

Otro indicativo del cuidado que los lugareños tienen por sus montañas, son el alfombrado vegetal que pudimos pisar con los restos del triturado del ramaje de los pinos caidos...

Nuestra etapa final era el....

¡ atención, explicación del título de la crónica!,,, Castillo de la Encomienda...¿ lo vemos ?...
Aquí montón de información...que así me ahorro de explicar..

La llegada a la ermita de San Antonio  de Padua, proporcionó informción a las féminas, que la gracia de ese santo era recibir pedradas el día 13 de junio porque así se facilitaba la consecución de un novio..

Yo sólo pongo la foto...sin comentarios....

Una suave pista nos fue acercando a los coches y después...ya por el pueblo...nos dirigimos al restaurante..

La comida estuvo bien en relación calidad / precio,,, y mejor todavía la barra libre de chupito de arroz que se sirvió generosamente el personal..

Ya va siendo costumbre, pero que conste que el personal todavía no ha llegado al nivel eítico que parece  por lo que se cuenta en las últimas crónicas..