Para Duli
Por la Andalusa senda
vertical, toda hacia abajo
en silencio va “mi menda”,
evitando bien los riscos,
atento al duro trabajo,
de cuidarme los meniscos.
De pronto, el agudo grito
multiplícase en el aire.
Sin tiempo, miro hacia atrás.
Allí está Ella bajando,
gritando, manoteando,
braceando y rechillando:
¡Fuera bicha, vete ya!
¡ Ví- bo-ra! ¡ Ví-bo-ra!.
No se me descompone el rostro.
Afirmo bastones y arrostro,
la sin par obligación,
de parar ya la carrera,
de tamaña proporción.
Un placaje no pensado.
Se para en seco,¡susto pasado!.
¡Oh terrible decepción!.
No pronuncia: ¡Gracias Paco!
¡Salvaste mi tropezón!.
Al contrario, con gran saña,
manotea, pega, araña.
Yo sufro, con cristiana obligación,
el infame trato habido,
por mi humana intervención.
“La próxima vez va al barranco ¡ Palabra! “
¿Quien sois vos, Comendador,
ResponderEliminarque tachais, con fiera saña,
de miedosa a la compaña
por que huía del horror?.
¿Acaso no fué un placer
recibir en vuestros brazos
(aún a costa de un trastazo)
a tan hermosa mujer?.
Puesto ¿que importancia tiene
morir defendiendo un sueño?;
siempre es mejor que el empeño
de vivir que algunos tienen.
Y puestos en tesitura,
dadle gracias al Señor
que os dió fuerzas y valor
de reaccionar con bravura.
Que el corazón de un valiente
está tan lleno de amor
que no infunde gran temor
ni la más grande serpiente.
Una vez leidos los versos,llego a la conclusión de que el arrebato de tan tierna doncella ha sido mal interpretado,ni fueron gritos,ni saltos,ni golpes,ni miedo,
ResponderEliminarsimplemente fue una forma de llamar la atención,de lo que se deduce que todo es debido a falta de cariño,propongo que todos le enviemos emilios cariñosos para conseguir una rapida mejoria.
Me siento incapaz
ResponderEliminarde agradecer con versos
tanta atención y gusto
pues esperaba, al leerlos,
continuar con el susto
pero, ¡oh maravilla!
En su lugar sólo encontré
versos, ripios y
ausencia de disgusto.
Un placer y una risa
me ha producido la lectura
de estos escritos sin prisa.
Me dejais sin palabras. Es un placer leer vuestros comentarios. Un saludo.
ResponderEliminarAnda que andarás.
ResponderEliminarCircular por los alrededores de Genovés-08-10-05
(Una visión muy particular de lo que fué la ruta).
La crónica de esta semana resulta muy fácil, aunque solamente sea por que a media ruta, por el barranco del Lobo, se escucharon los más espeluznante gritos que haya proferido jamás laringe humana en el transcurrir de los tiempos. Se trataba de nuestra querida Duli, enzarzada a pierna partida con una monstruosa serpiente pitón, (tampoco sé si era de esa marca) negra como el carbón, horripilantemente negra ella y de, aproximadamente, 300 metros de largo y 50 de ancho o circular. Si sería grande que no la vimos nadie. De lo que sí estamos seguros es de que el susto no nos lo quita ni la Bernarda, aunque podemos creer y creemos que si alguien se asustó fue la ingénua serpiente, pobrecilla ella, a la que a estas alturas, y según nuestros más esmerados análisis de la situación provocada por los chillidos, estarán haciendo una resonancia post mortem o, al menos, un electrocardiograma que muestre como a quedado de averiado su pobre corazón tras los alaridos de nuestra amiga. Ni que decir que Paco (siempre lo paga él) intenta también recuperarse del soponcio que le produjo la posibilidad de verse en el fondo del barranco como consecuencia de la embestida de nuestra asustada Duli. Por lo demás, normalidad absoluta: Salimos de la Umbría de Benavent, en Genovés, camino del mirador del Pla pero, cuando nos descuidamos, estábamos en unas antiguas canteras (dicen que romanas) de mármol rosa, donde aprovechamos para almorzar en gracia de Dios. Luego del ágape y tras perdernos seiscientas dieciséis veces, enfilamos, al fin, la Senda Andalusa que nos llevo, por el barranco del Lobo a la Font d’Alboi, donde nos esperaba un restaurante en el que nos hicimos sendas cocas, cervezas y aguas (no era para menos, por que el calor ya apretaba).
Nos quedaba lo peor: 3 kilómetros de antipático asfalto hasta la llegada a los coches. Besos, abrazos y ¡hasta la otra!. 14 kilómetros; 600 de desnivel acumulado y 5 horas y algo de marcha. Al término de la excursión se comentaba por algún participante que cada vez caminamos más despacio, lo cual, aunque mentes malandrinas pretendan atribuirlo a falta de fondo, es señal inequívoca de que estamos "madurando" y no me refiero a que nos hacemos viejos (aunque eso, también) sino a que estamos aprendiendo a caminar entre Natura; a detenernos, cuando vale la pena hacerlo, que es casi siempre, y ver las maravillas que contiene el entorno y que, si vamos aprisa, pasamos por alto. ¡Que cunda el ejemplo y enhorabuena a todos!.
El rincón de "botasduras"
ResponderEliminarEL ATAQUE DE LOS REPTILES - 09-10-05.
Gracias a unos nervios de acero y un total dominio en las mas adversas y terribles situaciones, ha permitido que una de nuestras mejores y mas adictas senderistas aguantara el ataque de un despiadado reptil
que, de forma horrible y sin ninguna clase de miramiento, se ha cruzado en su camino. Me invade la angustia cuando recuerdo tan terrible momento; todo ha sido tan rapido que no existe forma de relatarlo, es cierto que el golpe principal lo ha detenido nuestro jefe de expedición, el cual no salia de su asombro y apenas podia entender lo que pasaba pero, eso si, ha resistido.
No recuerdo una situación tan simpatica desde hace muchisisisisismo tiempo,creo que merece la mención de honor de la semana por la entereza demostrada. Duli, te mando desde aqui un beso muy fuerte compañera, es un honor caminar a tu lado.