¡¡Banderita, tú eres roja, Banderita, tú eres alta!!

Alto de la Bandera..cumbre deseada
Alto de la Bandera, meta programada.
Alto de la Bandera, fita señalada,
Alto de la Bandera…¡ cota conquistada!.
Parece el parte de guerra de una acción bélica ( en verso), pero en realidad, resume perfectamente lo que ha sido la ruta del dia de hoy. La iniciamos, casi de noche..¡ porfa, que nos pongan luz para el camino!...Amunt. Ra.Ra.Ra. Es que hoy practicamos por primera vez, la mirada solar matutina- Tita dixit- y no había ni pizca de sol al llegar.
Repuestos de la momentanea ceguera, allá que nos fuimos. Pudimos seguir la trocha gracias a las indicaciones y fotos de anteriores compis que nos legaron suficiente información. Para hacer “bota”, pues la primera trialera, que nos dejó en tierra firme asfaltada…¡bendito asfalto! y que nos condujo hasta la central eléctrica .

Foto de rigor y continuación hasta la Fuente de la Rinconada. Refresquito, foto y ….allá arriba, pero que muy arriba, la deseada, programada, apetecida, y luego “odiada” cumbre del Alto de Bandera. ¿Exagero?. Creo que no. Unas cuestas impresionantes, inacabables , y lo que es peor, intercalados, peligrosos y verticales descensos que nos introducían en profundos barrancos para luego, obligarnos a subir trepando, todo el nivel que habíamos descendido.

Hartos de tanto sube y baja, y faltos de “chicha”, decidimos almorzar al abrigo de los vientos, mirando de reojo, entre bocado y bocado, lo que nos faltaba todavía.

Afortunadamente, lo peor ya lo habíamos recorrido y llegados al llano..jejejjeje. ¡¡¡sí!!!, al llano, pudimos acercarnos apaciblemente al dichoso Alto Banderil y contemplar, ahora desde lo alto, todo lo que habíamos tenido que ascender.
La vista valió la pena, pues el claro día, nos permitió identificar a algun@s picos , sierras y pueblos.

El descenso fue apacible, aunque cansado. Recorrimos una extraña pista rocosa, completamente plana que en suave descenso, nos acercó a Pelma en donde dimos por concluida tan cansada y fatigosa ruta. La guinda fue la consabida “troballa” por parte de nuestra amiga …”la que todo lo encuentra”…de un extraño resto dental…puuuuaaaaf qué asco!!!al pié de una mesa del área. Tres raros… ¿dientes?.. ¿dentadura falsa de muñeca? ( en ese caso, sería de la muñeca diabólica)…¿hebilla de cinturón?...el caso, permanece en el misterio, formando parte ya de la leyenda urbana, perdón montañera, de que “ ¡ ojo, que ella todo lo ve, cuidado con lo que perdéis en el monte!!!!!!”. Besos y abrazos, saludos y despedidas y hasta la próxima.