Sumó unos frondosos pinares que nos proporcionaron buena sombra...
Sumó un recorrido por antiguos caminos ganaderos..
Sumó una vertiginosa senda..
Sumó un tremendo calor a los que llegaron...la visita histórica al castillo medieval de Peñarroya...
Y en fín...sumó la compañía de amigos que hacía tiempo que no veíamos..
Peroooooo...¿hoy no hay detalles?...
¡ Claro que sí !...
En primer lugar, tengo que dar las gracias a Street Wiew que me permite visualizar en casa los lugares a visitar y saber no solo donde está el principio de ruta, sino incluso la calle adecuada para aparcar...
Situados pues en el inicio, nos dimos de bruces con una empinadísima pista cementada que parecía romper piernas...
Menos mal que pronto lo cementado, se convirtió en una preciosa pista...empedrada... que nos fue remontando el Barranc del Llop perfectamente sombreados y fresquitos...¡ la "caló, vendría después!..
Unas marcas de marcha, nos indicaban que en breve, corredores avezados y alocados, recorrerían el mismo camino, pero no como nosotros..sosegados y tranquilos.. sino botando y brincando de piedra en piedra...
El final del barranco, lo marcó una enorme losa que nos llevó hasta la antigua vereda pecuaria que seguimos teniendo a cada lado una comarca distinta..
Poco después, ya estábamos en el Barranc de la Tosca, estrecha y pedregosa senda que nos acompañó hasta la hora del almuerzo...un pelín más temprano que lo habitual...
Hay que hacer constar, que el personal no protestó por el adelanto de la hora...
Llegados pues al final de ruta, volvimos a los coches y nos dirigimos al principio del pueblo, donde nos esperaba la segunda ruta de la jornada...la subida al castillo..
Esta subida era bastante abrupta, tanto que ya algunas decidieron quedarse a dar una vuelta por el pueblo..
El calor apretaba y aunque la senda era por la Ombría del Castell, el sol pegaba de lo lindo..
Unos oportunos miradores,nos permitieron, disfrutar de la hermosura del río en la zona..
Las aguas turquesas, tranquilas invitaban al baño...
Pero no era día de baño, sino de subidas...
Una antigua calera nos proporcionó un pequeño descanso pero la senda...inmisericorde...nos esperaba...
Ya a la vista de los primeros muros, algunos decidimos que ya estaba bien de trepar y protegidos en una agradable sombra, nos dedicamos al noble arte de la contemplación del paisaje y actualización de archivos..¡ hacía tanto tiempo que no nos veíamos...!.
Queda constancia gráfica de los que tocaron castillo, soportando...en aras del más recio senderismo: subida, calor y agotamiento...¡ A ellos loor!.
Regresados a los coches, besos, abrazos, despedidas...¡ a una hora realmente temprana..la 1 !.
P.D.- Como siempre..."Quien vino la disfrutó...quien no vino...se la perdió "
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