Aprovechando una inesperada visita a Denia, decidí dar una vuelta por el Parque Natural del Montgó. Se me plantearon dos alternativas: La Torre del Gerro o La Cova Tallada. Opté por empezar por la primera. Se trata de una corta, pero fuerte subida hasta la atalaya que domina tanto el Cabo de San Antonio, como toda la costa de Denia. El mar, inmenso. Lástima que hubiera neblina.
En caso contrario, hubiera podido divisar Ibiza a lo lejos. La torre es una fortaleza que servía para avisar de la presencia de piratas, tan frecuentes en el s. XVI . Su silueta, con forma de jarro, le da nombre. Allí mismo empieza la senda que, atravesando todo el Parque Natural, lleva hasta Jávea y la cumbre del Montgó.
Una vez disfrutadas las vistas, bajé con ánimo de llegar a La Cova Tallada.
Se trata de un itinerario, recientemente acondicionado que lleva hasta una antiguas canteras, junto al mar, que sirvieron para extraer la llamada “piedra tosca”, tan utilizada en las construcciones de la zona.
Se trataba de ir por un estrecho sendero, a considerable altura sobre el mar. La posibilidad de "vértigus" y el ir en solitario, me hicieron desistir del intento..¡La prudencia manda!
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